Introducción: un referente del humor político argentino
Pedro Saborido se ha consolidado como una de las figuras más relevantes del humor y la reflexión cultural en Argentina. Guionista de Tato Bores desde los años 90 y creador junto a Diego Capusotto del emblemático programa “Peter Capusotto y sus videos” desde 2006, Saborido ha construido una trayectoria que combina el análisis social con la comedia inteligente. Su importancia radica en su capacidad única de capturar la idiosincrasia argentina, convirtiéndose en un cronista cultural de nuestra época.
Actividad reciente y nuevo libro
En noviembre de 2025, Saborido lanzó su más reciente publicación “Una Historia de la Felicidad”, un libro que explora este fenómeno que tanto anhelamos e idealizamos en nuestras vidas. En febrero de 2025, el escritor presentó su libro anterior “Una historia del amor” en Verano Planeta 2025, donde el Salón Real del Hotel Costa Galana estuvo colmado de marplatenses y turistas que rieron y se emocionaron con las historias.
En octubre de 2024, durante una conferencia en la Universidad del Sur de Buenos Aires, Saborido expresó: “Hay algo violento en el estado de ánimo social, una especie de neurosis. Empezamos a vivir un momento donde sentimos que nos estamos poniendo un poco locos todos. Hay más peleas, más gente hablando sola y a los gritos”. Estas declaraciones reflejan su constante análisis de la realidad argentina contemporánea.
Un recorrido por su obra literaria
La producción editorial de Saborido abarca diversos aspectos de la cultura argentina. Entre sus títulos destacan “Una historia del peronismo” (2018), “Una historia del conurbano” (2020), “Una historia de la vida en el capitalismo” (2022), y “Una historia del fútbol”. Cada obra constituye un ejercicio de reflexión que combina humor, crítica social y profundo conocimiento de la realidad nacional.
Conclusión: un intelectual necesario
Pedro Saborido representa una voz indispensable en el panorama cultural argentino. Su análisis sobre el humor en tiempos de cambios políticos demuestra su lucidez: “No sé si es más fácil o más difícil hacer humor con Milei. Depende del estado del ánimo de la persona que lo hace. A veces, el humor sale de un buen estado de ánimo y a veces el humor es la última instancia”. Su capacidad para transformar la observación cotidiana en reflexión profunda, manteniendo siempre el humor como herramienta de análisis, lo convierte en un cronista esencial de nuestra época. Para los lectores argentinos, seguir su obra significa comprender mejor la sociedad en la que vivimos.
