Día del Ferretero: Un oficio centenario que mantiene su esencia de servicio y proximidad
Una celebración con historia y presente
En Argentina cada 3 de septiembre se celebra el Día del Ferretero, fecha que recuerda la fundación de la Asociación de Ferreterías y Bazares de la República Argentina en el año 1905, hoy conocida como Cámara de Ferreterías y Afines de la República Argentina (CAFARA).
La celebración tiene sus raíces en los albores del siglo XX, cuando los ferreteros argentinos enfrentaban desafíos complejos, desde la competencia desleal hasta la falta de representación ante las autoridades. Fue entonces cuando un grupo de visionarios unió fuerzas para crear una organización que protegiera y promoviera los intereses del sector, buscando fomentar una atención de calidad en el servicio al cliente.
Presente y alcance nacional
Actualmente existen en el país más de 15.000 ferreterías, aproximadamente una cada 3.000 habitantes. El 20% está orientado al comercio industrial, mientras que la gran mayoría (80%) trabaja de cara al consumidor final.
Muchas son negocios familiares centenarios que se transmiten de generación en generación, donde el ferretero cumple un rol que trasciende la venta: asesor técnico, consejero y traductor de “cosas y cositos” que ayudan a resolver problemas cotidianos.
Evolución y adaptación
La evolución del rubro ha sido notable: desde los antiguos almacenes de ramos generales hasta los comercios actuales, que pueden ofrecer más de 20.000 artículos entre herramientas, maquinarias, insumos eléctricos y materiales de construcción. Este crecimiento exige conocimientos técnicos que los ferreteros transmiten con lenguaje simple, sumando consejos de seguridad y asistencia posventa, un valor diferencial frente a las compras online.
Compromiso con el futuro
Con más de 120 años de trayectoria, las ferreterías siguen siendo mucho más que un punto de venta: son un servicio de proximidad, asesoramiento y confianza para hogares, trabajadores y barrios de todo el país.
Los ferreteros han evolucionado de simples comerciantes a asesores técnicos, convirtiéndose en pilares indispensables en sus comunidades. Esta fecha conmemora el pasado y subraya el continuo impacto de estos profesionales en la vida diaria y su papel crucial en el futuro de nuestras sociedades.
