La parma: un clásico argentino en la gastronomía
Introducción
La parma, un plato típico en la gastronomía argentina, ha ganado popularidad en las últimas décadas y se ha convertido en una de las elecciones favoritas para muchas personas en el país. Su mezcla de sabores y su versatilidad la han posicionado como un ícono en los menús de numerosas parrillas y restaurantes. Esta preparación, que puede variar en sus ingredientes, refleja la rica tradición culinaria de Argentina y su influencia en la comida casera.
¿Qué es la parma?
La parma consiste principalmente en pechuga de pollo o carne de res, empanizada y frita, cubierta con salsa de tomate, jamón y queso. Este plato puede tener diferentes variaciones dependiendo de la región del país, pero la esencia permanece: la combinación de sabores deliciosos y su presentación atractiva que invita a disfrutarla en cualquier ocasión. En la ciudad de Córdoba, por ejemplo, se le denomina “parrilleta” y puede incluir ingredientes adicionales como pimientos y aceitunas.
Popularidad y contexto actual
Los últimos años han visto un resurgimiento en la popularidad de la parma, impulsado por la tendencia del ‘comfort food’, donde las personas buscan sabores que les recuerden comidas caseras. Con la pandemia de COVID-19 y el confinamiento, muchos han optado por aprender a cocinar en casa y revivir recetas tradicionales, entre las cuales la parma ocupa un lugar destacado. Además, el auge de las redes sociales ha permitido que estos platos sean más visibles y apreciados, con numerosos influencers compartiendo recetas y variaciones en plataformas como Instagram y TikTok.
Conclusión
La parma es más que una simple comida; es un símbolo de la cultura argentina, que sigue evolucionando y adaptándose a las nuevas generaciones. Su fácil preparación y su versatilidad la han consolidado como un plato preferido no solo en restaurantes, sino también en las cocinas de los argentinos. Parece que la parma ha llegado para quedarse, y su futuro sigue brillando en el panorama gastronómico del país, prometiendo seguir deleitando a quienes la prueben. Los amantes de la buena comida seguirán disfrutando de este clásico, mientras que las nuevas generaciones continúan explorando y reinventando esta deliciosa tradición.
